El 17 de octubre de 2018 marcó el comienzo de una nueva era para Canadá con la legalización del cannabis recreativo. Cinco años después de esta decisión histórica, es hora de hacer balance y analizar las consecuencias de esta medida.
Temores expresados ante la legalización
Antes de la legalización del cannabis recreativo en 2018, muchos debates Las discusiones sobre sus posibles efectos se estaban produciendo no sólo entre la población canadiense, sino también en otros países donde también se discutía este tema. Figuras políticas como el gobernador estadounidense de Nebraska, Pete Ricketts, y el político alemán Markus Söder, han expresado su preocupación por el peligro potencial del cannabis, especialmente para los jóvenes.
El apocalipsis previsto no se cumplió
Según Jean-Sébastien Fallu, profesor asociado de la Escuela de Psicoeducación de la Universidad de Montreal, todavía es demasiado pronto para sacar conclusiones definitivas sobre las consecuencias de la legalización. Sin embargo, subraya que la catástrofe pronosticada por algunos no se produjo. En cuanto a las consecuencias sobre la salud de la población, Jean-Sébastien Fallu cree que esto debería estudiarse durante un período más largo para obtener resultados relevantes.
Los resultados del sector del cannabis legal
El Consejo Canadiense del Cannabis, que reúne a los titulares de licencias de cannabis registrados en Health Canada, aprovechó este aniversario para hacer un balance de los desafíos que enfrenta la industria. Una encuesta reciente realizada por la organización destaca la urgente necesidad de reformas gubernamentales para impulsar este sector y asegurar su crecimiento continuo, así como su contribución a los objetivos de política pública de la Ley de Cannabis.
- La encuesta recopila respuestas de 122 productores de cannabis autorizados en todo el país.
- Destaca normas demasiado complejas y rígidas,
- Los desafíos también incluyen la lucha contra el mercado negro.
Cambios necesarios para apoyar a la industria
Para permitir que el sector legal del cannabis se desarrolle plenamente, parece esencial que el gobierno canadiense realice algunos ajustes legislativos y regulatorios. Las modificaciones podrían referirse a la simplificación de la normativa actual, considerada demasiado compleja y restrictiva por los profesionales del sector, o a la aplicación de medidas más eficaces para contrarrestar el persistente mercado negro.
En resumen, los resultados de estos cinco años de legalización del cannabis en Canadá parecen bastante positivos en general, aunque todavía queda mucho trabajo por hacer para consolidar este sector en auge. Por lo tanto, son necesarios ajustes en las políticas gubernamentales y un estudio más profundo de las consecuencias para la salud para garantizar un desarrollo armonioso de la industria del cannabis en los próximos años.
¿Un modelo a seguir para otros países?
Canadá fue el segundo país del mundo, después de Uruguay, en legalizar el cannabis recreativo y desde entonces ha Despertó el interés de muchas naciones que trazaron su propio camino hacia la legalización.. Países como Alemania y Kenia también han iniciado debates sobre este tema, teniendo en cuenta la experiencia canadiense en este tema.
Por tanto, la legalización del cannabis en Canadá puede servir de ejemplo para otros países que estén considerando tomar una decisión similar. Los éxitos y desafíos encontrados por el sector legal del cannabis en Canadá podrían permitir a estas naciones adaptar su legislación, regulaciones y políticas públicas de manera adecuada.
En conclusión, los resultados de esta primera media década de legalización del cannabis en Canadá son en general positivos, a pesar de que aún quedan algunos ajustes por hacer. La situación canadiense también parece interesante para otros países del mundo que quisieran emprender el camino hacia la legalización.
